✓ Alta Especialidad UNAM – Formación en Hospital General de México
✓ Detección temprana – Tecnología especializada para diagnóstico preciso
✓ Cirugía dermatológica – Eliminación y reconstrucción en una sola consulta
✓ Experiencia comprobada – Más de 10 años tratando cáncer de piel
✓ Enfoque integral – Desde prevención hasta cirugía reconstructiva
Evaluación completa de lunares y lesiones sospechosas. Detección temprana que puede salvar vidas. Seguimiento personalizado según tu tipo de piel y factores de riesgo.
Extracción de tumores benignos y malignos con técnicas mínimamente invasivas. Procedimientos ambulatorios con resultados estéticos óptimos.
Tumores benignos, malignos y de uñas. Manejo integral desde el diagnóstico hasta el tratamiento definitivo con enfoque reconstructivo.
Queratosis actínicas y lesiones que pueden evolucionar a cáncer. Tratamiento temprano para prevenir complicaciones futuras.
Más del 95% de los cánceres de piel son curables cuando se detectan a tiempo. Mi experiencia en dermato-oncología me permite identificar lesiones sospechosas que otros podrían pasar por alto.
Cáncer de piel – Detección temprana y tratamiento integral
Tumores benignos – Eliminación segura con mínimas cicatrices
Lesiones pre-malignas – Prevención antes de que evolucionen
Tumores de uñas – Diagnóstico especializado y tratamiento preciso
Tu piel merece la atención de una especialista. No esperes a que sea tarde.
Agenda tu evaluación dermato-oncológica y protege tu salud con experiencia médica certificada.
Tienes lesiones cutáneas que requieren extracción por salud o estética.
Necesitas tratar un tumor de piel con seguridad y precisión médica.
Buscas opciones quirúrgicas con enfoque en resultado estético.
Te interesa resolver el problema de forma ambulatoria y con mínima recuperación.
Querés un procedimiento realizado por un especialista en piel, no por un cirujano general.
La mayoría de las intervenciones quirúrgicas dermatológicas ofrecen una recuperación rápida, sin hospitalización y con excelentes resultados tanto médicos como estéticos.
Gracias a la precisión de las técnicas utilizadas, las cicatrices suelen ser mínimas y se integran de forma natural en la piel. El seguimiento postoperatorio personalizado garantiza una correcta cicatrización y tranquilidad para el paciente.
Realizamos la extirpación de tumores cutáneos benignos y malignos con precisión médica y enfoque preventivo. Cada caso es evaluado para determinar la técnica más segura y eficaz.
Tras la extracción de lesiones, se aplican técnicas reconstructivas que priorizan la funcionalidad y la estética. El objetivo es preservar la salud sin descuidar la armonía del rostro o la zona tratada.
La mayoría de las intervenciones se realizan en consultorio, bajo anestesia local y sin necesidad de hospitalización. Son procedimientos seguros, con tiempos de recuperación breves y control médico personalizado.
Tienes lunares, bultos o lesiones que han cambiado de forma, color o tamaño.
Has notado manchas nuevas o persistentes en la piel.
Tienes antecedentes personales o familiares de cáncer de piel.
Te expusiste frecuentemente al sol sin protección.
Buscas una revisión dermatológica confiable para descartar riesgos.
Un diagnóstico temprano permite tratar los tumores cutáneos de forma efectiva y con excelentes resultados estéticos y médicos. En el caso de tumores benignos, su extracción es rápida y segura; en lesiones malignas, el tratamiento oportuno reduce el riesgo de complicaciones y asegura un mejor pronóstico.
Más del 90% de los cánceres de piel detectados a tiempo pueden tratarse con éxito, sin secuelas graves y con mínima intervención quirúrgica.
Son lesiones no cancerosas que suelen tener un crecimiento lento y no representan riesgo vital. Algunos ejemplos comunes incluyen lunares, queratosis seborreicas, lipomas y quistes. Aunque no son peligrosos, pueden requerir extracción por razones estéticas, funcionales o de prevención.
Incluyen diferentes tipos de cáncer de piel como el carcinoma basocelular, carcinoma espinocelular y el melanoma. Su detección temprana es fundamental, ya que algunos pueden ser agresivos y comprometer la salud si no se tratan a tiempo.
Son menos frecuentes pero importantes de vigilar. Pueden ser benignos, como verrugas o granulomas, o malignos, como el melanoma subungueal. Cualquier cambio en el color, forma o grosor de las uñas debe ser evaluado por un dermatólogo.
Tienes manchas ásperas, rojizas o escamosas en zonas expuestas al sol.
Has notado cambios recientes en el tamaño, forma o textura de alguna lesión en la piel.
Tienes antecedentes de exposición solar intensa o sin protección.
Buscas prevenir el cáncer de piel antes de que aparezca.
Querés una evaluación dermatológica confiable y sin alarmismos.
El tratamiento de lesiones pre-malignas es altamente efectivo cuando se realiza a tiempo. Tras la intervención —ya sea con crioterapia, láser, peeling o terapia fotodinámica— la piel se regenera en pocos días, recuperando su apariencia y salud.
Lo más importante: se reduce significativamente el riesgo de que la lesión evolucione a cáncer de piel, lo que te da no solo resultados visibles, sino también tranquilidad y prevención real.
Son lesiones cutáneas causadas por daño solar acumulado. Suelen aparecer como parches ásperos, rojizos o escamosos en zonas expuestas al sol, como rostro, cuero cabelludo, escote o manos. Aunque son benignas, pueden evolucionar a carcinoma si no se tratan.
TEl diagnóstico se realiza mediante examen clínico y, en algunos casos, dermatoscopía o biopsia. Los tratamientos incluyen crioterapia, cremas tópicas, láser o terapia fotodinámica, según el caso. Detectarlas y tratarlas a tiempo es clave para prevenir el cáncer de piel.